Mi idea de Pionero de la belleza surge de esta creencia: conectar la Belleza a la vida para satisfacer mejor las necesidades del consumidor. El cliente pide a la operadora de Belleza profesionalidad e innovación, y si no está satisfecho, busca un mejor asesoramiento. Por eso son necesarias nuevas ideas, positividad y coraje para apoyar proyectos innovadores en el crecimiento profesional.
En mi experiencia he aprendido que hay dos maneras de lograr este objetivo: una es la búsqueda de las necesidades del cliente, la otra es el deseo de comprender los propios límites encontrando las habilidades para superarlos. Al unirnos a los operadores de la Belleza y el Bienestar y apoyarlos en el maravilloso viaje del conocimiento, la conciencia y la prosperidad, damos un pequeño paso adelante en el crecimiento de una conciencia humana más responsable y atenta.
Los Pioneros de la Belleza son pioneros futuristas con la misión de volver a poner al Hombre en el centro. Se mueven en busca de soluciones concretas a partir del Laboratorio Antropológico Relacional, donde las experiencias y las disciplinas holísticas se encuentran para perseguir un objetivo común: prolongar la juventud, fortalecer la autoestima, disminuir la ansiedad, y luego aumentar el bienestar relacional, con un enfoque de los cosméticos lejos de los estereotipos.
Los Pioneros de la Belleza han creado un proyecto llamado Academia de Belleza Universal, un lugar donde se realiza el pensamiento positivo, donde no miras una parte de ti sino que haces un viaje a través del Uno, hacia el Universo, incluyendo todo lo que te rodea: tus hijos, tus animales, tu hogar, tus colegas.
Nuestra filosofía corporativa se inspiró en el Renacimiento, un período histórico de gran renovación social y cultural que se opuso con determinación al oscuro mundo de la Edad Media. Y ha devuelto al hombre al centro del tejido social y de la propia humanidad.
Los cosméticos promovidos por los Pioneros de la Belleza son como una medicina holística, capaz de prevenir y mejorar la condición humana. La cosmética es una medicina holística, y el profesional de la belleza es un médico de primeros auxilios capaz de ayudar a los necesitados.
El desarrollo de productos ya no es suficiente: es el momento de centrarse en la formación de profesionales para que se conviertan ellos mismos en Pioneros de la Belleza, exploradores que estudian con pasión el alma y los deseos de los clientes para crear una oferta que se ajuste a sus necesidades. Este enfoque remodela la centralidad del hombre y los cosméticos, promotores de la responsabilidad social y la felicidad en el siglo XXI.
A partir de estos principios hemos creado la idea de la Red de Belleza Universal, tratando de reconectar a los operadores, los investigadores, la gente alrededor de una nueva cultura basada en la construcción y la regeneración en lugar de la destrucción de los valores y la frustración.
El primer paso es difundir una nueva cultura de la Belleza, con acciones concretas también en el sistema de formación básica para reprogramar las conciencias de quienes la gobiernan.
Creo en la continua exploración e intercambio de culturas que cada día generan innovación e influyen positivamente en el mundo. Apoyo la investigación inspirada en el estudio de cómo el consumidor realmente vive y sueña la experiencia de la Belleza y el Bienestar. Promuevo la creación de soluciones cosméticas no convencionales para satisfacer plenamente las necesidades reales de los profesionales y consumidores contemporáneos, mirando más allá de las prácticas comerciales tradicionales para responder eficazmente a la responsabilidad cada vez mayor de la belleza en la sociedad contemporánea.
Gracias a todos los Pioneros de la Belleza que acompañan mi sueño.